En el mundo del agro, donde la innovación y la adaptabilidad son fundamentales, Hernán Moreno, un empresario agropecuario, nos comparte una perspectiva única sobre cómo la implementación temprana de tecnología y el protagonismo in situ han transformado su empresa y su entorno.
Ser un implementador temprano de tecnología
Hernán nos habla de cómo ha adoptado la tecnología de manera temprana en su empresa, entendiendo que probar nuevas herramientas y métodos rápidamente puede generar grandes beneficios. “La innovación temprana genera no solo una mayor renta, sino que también impulsa todo el sistema”, comenta Hernán. Su enfoque es claro: probar en pequeña escala, evaluar resultados y, si es exitoso, escalar. Esta estrategia le permite minimizar riesgos y maximizar oportunidades.
“Si te va bien, avanzás un montón; si te va mal, perdiste muy poco”, reflexiona Hernán, enfatizando que el aprendizaje viene de la experimentación.
¨El protagonismo in situ: No quedarse en la tranquera¨
Además de ser un implementador temprano, Hernán destaca el concepto de ser “protagonista in situ”. Para él, ser parte activa del proceso en el campo, más allá de las responsabilidades directivas, es esencial. El liderazgo no solo se ejerce desde una oficina, sino estando presente donde se produce el cambio, afirma Hernán.
Muchos empresarios pueden sentir la tentación de delegar por completo las operaciones, pero Hernán cree que el verdadero valor está en involucrarse directamente en los desafíos diarios. Para él, esta presencia constante ha sido clave para inculcar una cultura de innovación en su equipo. “El que no se contagió, probablemente no se quedó”, menciona, subrayando la importancia de un equipo que comparta su entusiasmo por mejorar continuamente.
Uno de los aspectos más notables de la charla con Hernán es cómo la innovación se ha convertido en una parte esencial de su empresa, contagiando a su equipo. Los colaboradores, desde los operarios hasta los gerentes, comparten la misma actitud proactiva: buscar siempre mejorar, implementar nuevas ideas y asumir riesgos calculados. Hernán nos explica que esta cultura no surgió de la nada, sino que es el resultado de años de trabajo y ejemplo, demostrando que la innovación constante es posible y rentable.
Persiguiendo nuevas oportunidades
Hernán no se queda en el confort de lo conocido. Ya sea en la implementación de cultivos de cobertura, rotación intensificada o el uso de doble turno, su enfoque siempre está en aprovechar al máximo cada oportunidad que aparece, tanto a nivel productivo como social.
Además, su participación en entidades como CREA le ha permitido expandir su red de contactos y adquirir un conocimiento invaluable, una ventaja competitiva que le facilita estar al tanto de las últimas tendencias y oportunidades en el sector.
¿Crecimiento horizontal o vertical?
Cuando se le preguntó sobre la bioeconomía y la integración de eslabones productivos, Hernán dejó claro que su estrategia actual está enfocada en el crecimiento horizontal, buscando maximizar el uso de los recursos que ya tiene disponibles antes de diversificar hacia otros sectores. Sin embargo, es consciente de que en un futuro cercano, la verticalización y la adición de valor en origen serán esenciales para el crecimiento sostenible del sector agropecuario.
La entrevista con Hernán Moreno nos deja un mensaje claro: la innovación, el protagonismo y el trabajo en equipo son las claves para avanzar en el sector agropecuario. Su enfoque práctico y su disposición para asumir riesgos han hecho de su empresa un ejemplo de cómo combinar tradición y modernización en el agro argentino.